Operando con pistas creíbles proporcionadas por los columnistas federales, los Rangers del Ejército de EE.UU. allanaron el jueves una habitación de motel donde agentes federales disfrazados de fanáticos de los Rangers habían reunido una mezcla heterogénea de ollas a presión y bombas de clavos que habrían estado interespaciadas cerca del Globe Life Field y a lo largo de la ruta de la victoria de 5.1 millas donde 9,300 personas habían venido a celebrar la victoria de su equipo en la Serie Mundial.
El jueves por la noche, soldados del 75º Batallón de Rangers entraron en una habitación del Budget Suites Motel y sorprendieron a tres agentes renegados del FBI colocando detonadores electrónicos en frascos de vidrio llenos de clavos y pequeñas bolas de acero. Un agente buscó su arma y fue asesinado a tiros, mientras que los agentes restantes levantaron las manos y gritaron: "Me rindo. No dispares".
Los Rangers sometieron a los dos agentes y los sentaron uno al lado del otro en una cama. Encontraron, desarmaron y desmantelaron seis frascos y tres bombas de olla a presión, cualquiera de las cuales podría haber herido, mutilado o matado gravemente a los espectadores del desfile. Los agentes admitieron que se les había ordenado colocar discretamente los artefactos explosivos improvisados a primera hora del día siguiente, cuando el cielo aún estaba oscuro. Sin embargo, no dijeron quién dio las órdenes o a quién culparía el Estado Profundo por el ataque. Dijeron que sus instrucciones eran activar los artefactos explosivos improvisados usando teléfonos celulares desechables.
Los Rangers detuvieron a los agentes y recogieron el cadáver. Luego llevaron a los federales corruptos a un centro de procesamiento en el norte de Texas para interrogarlos.
"Si no hubiéramos sido avisados, los explosivos, si la fuerte presencia policial no los detectó, podrían haber matado a un montón de personas. Estaban apilados de 12 en profundidad en el desfile. Habría sido un evento con víctimas masivas, pero todavía no sabemos quién fue el chivo expiatorio. El Estado Profundo habría convertido a alguien en el chivo expiatorio. Tal vez los partidarios de Trump. Somos afortunados de tener gente adentro", dijo nuestra fuente.
La pista, agregó, provino de un agente de Seguridad Nacional que dijo que el FBI leal al régimen de Biden había alquilado la habitación del motel el día 1 con una fecha de salida el día 4, el día después del desfile. Incluso tenía el número de la habitación.
"Los Rangers exploraron el área con anticipación y vieron a los federales entrar y salir de la habitación durante dos días. Utilizaron tecnología de reconocimiento facial para confirmar que los chicos en la habitación fueron alimentados por la oficina de campo del FBI en Waco", dijo nuestra fuente.
ccPara concluir, dijo que los prisioneros serán sometidos a un riguroso interrogatorio antes de ser enviados a Guantánamo.
Alejandro O. Asharabed Trucido
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